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Resulta que Charles es un cocinero terrible. Lo admitió una noche mientras veían Julie y Julia (y después, por supuesto, Charles descubrió la colección secreta de Erik de comedias románticas y luego se burló de ello sin parar y secuestró con entusiasmo los DVDs para encontrar una película para ver juntos). Entonces Erik juró valientemente que le enseñaría a Charles a cocinar apropiadamente, incluso después de que Charles hubiera insistido en que era ineducable. Pero parecía una buena idea en ese momento.

Sin embargo, no pareció tan buena idea cuando Charles logra quemar el pollo que están cocinando hasta que queda negro, y derrama salsa por todo el piso de la cocina de Erik y básicamente ensucia todo lo que es posible ensuciar. Y Charles se ríe y se ríe y se ríe, tan fuerte que hay lágrimas en sus ojos, incluso cuando se disculpa una y otra vez con Erik y trata de limpiar todo.

"Nunca," dice Charles una vez que el piso está (en su mayoría) libre de salsa y la cacerola arruinada ha sido abandonada en el fregadero y Charles está sentado sobre la encimera, todavía riendo. "Nunca me dejes intentar cocinar otra vez."

Erik también se ríe, y se ha estado riendo por un buen rato, tanto que le duele la cara, pero no quiere detenerse, y se acerca a los muslos de Charles, inclinándose para acariciarle la mandíbula.

"Sabes, no te creí cuando me dijiste lo malo que eras cocinando," murmura Erik sobre la piel de Charles.

Charles sonríe y pasa una mano por el cabello de Erik. "Lamento haber arruinado nuestra cena," dice suavemente.

Erik sonríe, demasiado divertido como para enojarse. "Podemos salir," dice fácilmente, y besa a Charles. La cena puede esperar, piensa. Tienen cosas más importantes que hacer.

500 Days of Charles  //  CherikWhere stories live. Discover now